Salgo a caminar, llevo las manos juntas,
no voy rezando, únicamente hago presión entre ellas.
Hay un círculo, tengo una conciencia absoluta de mí
y el espacio se tiende desde mi lugar.
Como un vapor de pronto
mi cabeza aleja a las personas que caminan en la calle,
convoca a su auditorio,
¿en qué nos habíamos quedado la última vez?
Alberto López Fernández
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